Convivencia de la Agilidad y el mundo online ¿cómo vamos?
Por Vanessa Amaya
El trabajo en remoto no es novedad, muchas empresas y profesionistas freelance han implementado estos esquemas desde hace muchos años en roles, proyectos y servicios como el desarrollo de software, el reclutamiento de personal, el marketing, el diseño y las ventas, entre otros.
Así que el tema no es novedad pero su aplicación en este momento sí porque:
Algunas empresas que permitían cierta flexibilidad con esquemas de teletrabajo (algunos días a la semana o al mes) ahora tienen que escalar el esquema a todos los días y todo el tiempo.
Muchas personas han experimentado en algún momento de sus vidas el teletrabajo, pero para muchas otras esto es una experiencia totalmente nueva.
La agilidad no es para todos, el teletrabajo tampoco lo es
Sabemos que los marcos ágiles aplican para entornos de complejidad donde se requiere trabajar con ciclos cortos, generación de valor continua y aplicar praćticas emergentes por el grado de incertidumbre que se tiene, no todos los proyectos son así, no todos los productos son así por lo que la agilidad no es para todo.
Para el teletrabajo se necesitan medios y cultura (individual y colectiva):
Medios- equipos de cómputo que puedan ser trasladados, conexiones que permitan seguir teniendo acceso a los mismos ambientes de tecnología que se tienen habitualmente, acceso a herramientas colaborativas (entre otros).
Cultura- Disciplina para mantener el enfoque. Capacidad de automotivarse y saber buscar la motivación adecuada. Confianza en sí mismo y en el trabajo de los colegas, contar con límites de tiempo para evitar que el teletrabajo se convierta en creencia de disponibilidad de 24 horas por día.
Combinar teletrabajo con prácticas ágiles es una excelente combinación, ya que se ahorra la infraestructura física o en el caso actual, somos capaces de seguir produciendo a pesar de una pandemia. Esta combinación nos puede traer como resultado el mantenernos productivos a través de una correcta auto-organización, transparencia, confianza, políticas explícitas para este tipo de trabajo y sobre todo, una orientación a la generación continua de valor sin importar que las circunstancias hayan cambiado.
El teletrabajo puede sacar a la luz problemas de implementación de marcos ágiles
Me atrevo a decir que el teletrabajo es una prueba para quienes dicen ya ser ágiles en sus equipos y empresas, porque pone a prueba: la capacidad de auto-organización, la confianza, la capacidad de concentración y enfoque, la capacidad de no perder prioridades del día, mantenerse motivados y continuar generando valor día con día.
Recordemos: la agilidad es un medio, NO UN FIN. Así que si se utiliza como medio, en el momento de cambiar a esquema de trabajo, habrá por supuesto un periodo de adaptación pero no deberían de surgir problemáticas de cultura “comando y control” o gestión tradicional.
Los retos de comprensión para el teletrabajo
El ritmo de adaptación es distinto para cada quien, no todos se llevan su “laptop” a su casa y ya pueden producir igual que siempre ni inspirarse igual que siempre. Cada persona debe identificar su estilo de “teletrabajador” a través de poder seleccionar su lugar de trabajo dentro de su casa, identificar momentos necesarios de pausa, identificar las mejores horas para trabajar (donde se sienta con más energía e inspiración).
Algunos estamos viviendo este periodo de quedarnos en casa acompañados y otros lo están viviendo solos:
Los que estamos acompañados tenemos el reto de poder equilibrar, malabarear y combinar la convivencia con quien estemos para poder seguir trabajando. Muchos tenemos niños en casa, de por sí es un reto tenerlos entretenidos para que nos permitan trabajar pero se sumó el reto de la “bendita” escuela en línea así que tenemos que combinar el tele-trabajo con la tele-educación de nuestros niños.
Los que también estamos acompañados de nuestras parejas, también tenemos el reto de acuerdos para esta nueva convivencia y buscar el mayor equilibrio dentro de lo posible.
Los que están solos, pueden vivir con frecuencia los estragos del aislamiento si es que están acostumbrados a socializar en el ambiente laboral. El aislamiento puede traer baja de inspiración y motivación lo cual impacta directamente en la productividad.
Es importante que los equipos externen el tipo de ambiente que están viviendo en sus casas para facilitar la comprensión y flexibilidad del equipo.
Los retos de comprensión para la formación en línea
De por sí la capacitación presencial ya es todo un reto para quienes buscamos experiencias de aprendizaje enriquecedoras, la formación en línea es aún más reto ya que:
Aunque tengamos acceso a vídeo, no podemos estar viendo a los participantes todo el tiempo para captar su lenguaje corporal, asegurar que se sienten atendidos y escuchados, porque tenemos que estar atentos también a la proyección y a los recursos didácticos en línea a los que les tenemos que dar acceso.
Las dinámicas en línea tienen que ser creativas, no podemos limitarnos a preguntar y responder mientras se explica la teoría, tenemos que diseñar dinámicas que refuercen el aprendizaje mientras estamos conectados. Aparte las dinámicas necesitan ayudarnos a mantener la atención y el interés durante todo el curso.
Si se eligen recursos asíncronos (videos grabados y tareas para entregar) tienen que ser lo suficientemente desafiantes y motivantes para que facilite el tomar formación bajo demanda y no “tirar la toalla” después de algunas horas.
Un curso presencial no puede transformarse en un curso en línea solo por presentar las mismas diapositivas, hay que invertir tiempo creativo en realizar los cambios adecuados para adaptar el curso de manera eficiente para que lo disfruten los participantes y se siga manteniendo una experiencia de aprendizaje valiosa y enriquecedora.
Conclusiones
Tener la posibilidad de seguir produciendo a través del teletrabajo es un privilegio que no muchos tienen: tenemos que aprovecharlo.
Los comportamientos cuando estamos todos juntos en una oficia a cuando estamos ya en el mundo online son distintos por naturaleza por lo que es importante hablar de expectativas de comportamiento con frecuencia y ser lo más claros posibles.
Si antes en el equipo no se hablaba de lo que sucedía en casa, es buen momento para hacerlo, en función de que los demás comprendan los acuerdos que se tienen en casa, la dinámica de convivencia y los mejores horarios para estar disponibles.
Permitamos que el teletrabajo nos diagnostique acerca de nuestro mindset ágil.